Ermita de La Cruz-Senderos de la Calzada Romana, Perdices y Caballo Muerto-Ramblas del Pocico y Sangonera con La Pizorra

 

Accedemos desde la RM-603 del Palmar a Mazarrón, cruzando Sangonera La Verde hacia el Sur y final de la población, aparcamos junto al Jardín Javier Hernández Caro, 

en la Ermita de La Cruz (también Llamada Ermita Nueva); existía antiguamente una cruz de hierro, hito religioso para pastores y vecindario de la zona. 

En 1958 se construyó una primera capilla, antecedente del templo que hoy conocemos inaugurado en 2003.

Partimos en descenso hacia el Sur, cruzando el Cordel de Los Valencianos o Vereda Real, 

red viaria de origen medieval fue utilizada para la trashumancia de los rebaños que venían desde la Meseta, hacia el campo de Cartagena; por pista ascendente 

rodeando cultivos de cítricos para eludir el ramblizo a la derecha; al finalizar la recta, giramos a la izquierda para cortar un ramblizo; caminamos entre los bancales de limoneros y el lindero de la sierra; 

se acaba la pista 

y comienza una traza senderil en ascenso por una vaguada; enlaza con una pista en desuso con vistas de la Sierra del Puerto.

La seguimos por la izquierda entre matorral y piedra suelta, descendiendo hacia el Sendero de la Calzada Romana. 

La calzada romana no es tal calzada, sino una bonita pista con suelo rocoso y huellas de paso de los carruajes que transportaban el material de las canteras de la zona; 

comenzaron a explotarse en la era cristiana, se extraían materiales como cobre, hierro, áridos y principalmente yeso, su máximo aprovechamiento fue a mediados del siglo XX, eran arrendadas por el Ayuntamiento de Murcia para su explotación a un total de 23 empresas privadas. 

En 1979 El Valle fue declarado Parque Natural y se fueron dejando de renovar los arrendamientos, hasta que en 1991 acabaron las actividades mineras. Esta zona posee diversas canteras de piedra caliza, siendo las más conocidas las de Mayayo, explotadas durante el siglo XVIII, coincidiendo con la realización de obras tan emblemáticas de la ciudad de Murcia como el imafronte de la catedral o el Puente Viejo.

Tras seguir rectos en el cruce, alcanzamos la cadena de la Finca de las Llanas, 

comenzamos a descender entroncando con la bonita Rambla del Pocico durante solo 200 m; 

giramos a la izquierda en ligero ascenso, pasando junto a las ruinas de un cortijo destinado al ganado en la Finca de las Llanas; cambiamos de dirección por la florida Rambla de Sangonera un tramo; 

salimos por pista hacia Casas Altas en Torreguil, acabada la recta, podemos seguir rectos, o en 24m a la izquierda, torcemos por la derecha una endeble trazada, siguiendo el apenas visible Sendero de las Perdices, se unen mas adelante ambas trazadas y se define claramente su trayectoria.

Alcanzamos el puesto de caza, 

continuamos por la izquierda en ligero descenso, entre algarrobos emboscados en la densa vegetación mediterránea; atravesamos interesantes zonas aterrazadas, con abundancia de matorral y algo de barro por las recientes lluvias; 

enlazamos con el Sendero del Caballo Muerto, de suelo rocoso, finiquita en la Rambla de Sangonera a la altura de La Pizorra, 

una mina tipo qanat o galería con lumbreras, para la obtención del agua de las capas superficiales del nivel freático, la conducía hasta las zonas de cultivo de las fincas de Torreguil y Los Labradores. 

La Pizorra tiene una longitud aproximada de 3 km, desde su toma del agua hasta el punto de salida (bocamina), habiendo documentadas al menos nueve lumbreras a lo largo de su recorrido. 

El nombre de Rambla del Pocico puede deberse a los pozos o lumbreras que forman parte de este sistema de aprovechamiento de agua. Solo nos resta cubrir la escasa distancia por la rambla hacia la ermita, fin de trayecto.

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