Circular de Bolnuevo a Puntas de Calnegre

 

Accedo desde la Autovía Totana-Mazarrón (RM-3), a su final en la rotonda, continuo por la RM-332 y en la siguiente rotonda, en dirección Bolnuevo por la RM-D6, aparcando al pasar la siguiente rotonda junto a un centro de jardinería (37°33'54.76"N 1°18'4.08"W).

Salgo en dirección al camping durante 175 m, girando en ascenso por la urbanización Playasol de Bolnuevo, 

voy derivando hacia mi izquierda para dejar las viviendas y tomar la pista por la zona norte de Puntabela bajo el Cabezo de los Pájaros; 

con grandes vistas del Golfo de Mazarrón y la Isla Cueva de Lobos (hasta hace pocos años eran visibles las últimas focas monjes del Mediterráneo), 

empujo la bici un trecho corto y sigo pisteando faldeando la Sierra de las Moreras, para dejarme caer por una trialera que resulto extremadamente complicada.

El marcado clima árido, las escasas precipitaciones y altas temperaturas medias, con la influencia del Mediterráneo y la geomorfología de este territorio, dan como resultado, una zona de especial belleza y contrastes paisajísticos.

Rodeando Piedra Mala (111 m), desciendo por la pista de la Rambla de Picacho, realizo un tramo de 220 m por la pista principal, para tomar otra pista en desuso a la derecha, me conduce por sendero, 

cambiando de dirección junto a una pedrera, de nuevo a la pista principal; en 300 m, tuerzo a la derecha siguiendo otra pista, acaba en sendero cuando pedaleo por el paraje de Caraleño, me aboca al ramblizo de la finca rural Villa García.

Veo tres balsas consecutivas, de diferente tamaño y forma; el sistema de abastecimiento de aguas consta de una galería con lumbreras (pozos), conocida como qanat (del árabe "canal") infraestructura hidrogeológica para la captación de una capa de agua subterránea, su succión hacia el exterior y conducción por una o varias galerías de drenaje ligeramente inclinadas y dotadas de pozos verticales de acceso y aireación.

A finales del siglo XIX e inicios del XX las familias burguesas y adinerada formada por ingenieros, inversores y empresarios relacionados con la industria minera y metalúrgica, levantan llamativas residencias de verano como Villa García. Fue mayormente propiedad del matrimonio formado por Pedro García Caparrós (gerente de la Metalúrgica Santa Elisa desde 1885 y alcalde de Puerto de Mazarrón) y Francisca González Orozco, ambos de Vera (Almería). 

Se alza sobre un montículo amesetado, está delimitada por dos muros de contención, flanqueada por dos huertos, su estilo neoclásico lo conforman elementos decorativos de formas clásicas y motivos vegetales. Consta de cuatro habitaciones y otras dependencias anexas.

Costeo 

cruzando la Rambla de Villalba y el túnel de tarays de la Playa Covaticas, 

entro por la zona arenosa en la Playa del Ballenato al inicio de la exitosa Playa de Percheles, un arenal con forma de media luna y algunas palmeras, ahora acotada, 

la rodeo por la pista y emprendo el fuerte ascenso 

para hacer la trialera de Parazuelos.

Dejando a mi derecha el mojón delimitador de los términos municipales de Mazarrón con Lorca, en la Playa del Palomarico,

 entro en Puntas de Calnegre, 

donde la pesca y la agricultura bajo plástico, están dando paso al turismo que busca calas vírgenes en bellas playas exentas de masificación.

Pasada la población, continuo por la carretera desde Puntas de Calnegre hacia el Ramonete durante 1,3 km, 

giro a la derecha por pista, corto la ancha Rambla de Ramonete, hago una paradita junto al molino de Parazuelos 

y la Casa de los Tiranos; 

paso de Morros Negros al Alto de Percheles, corto la Rambla de Pastrana (coincide con el recorrido de una vía pecuaria, sirvió para trazar la vía del ferrocarril de Pastrana a Parazuelos), enlazando en las Covaticas con el track de la ida.

Desciendo a la Playa del Hondón del Fondo; 

girando por el sendero de Punta Benza a los acantilados que acogen bellas y agrestes calas, salpicadas de rocas con caprichosa apariencia, esculpidas por la erosión; cruzo la Rambla de Villalba entroncando con la pista de las Calas de Bolnuevo.

Paso el “cañón rojo”, 

cruzo la puerta que impide el acceso a vehículos no oficiales y asciendo la rampa en la Playa del Rincón,

 entrando por el “Oasis” en Bolnuevo, con sus campings y playas rebosantes de actividad; admiro las espectaculares gredas del “Paisaje Encantado de Bolnuevo”/Ciudad Encantada de las Gredas de Bolnuevo, 

examinando sus espectaculares formaciones geomorfológicas, destacan dentro de un paisaje semiárido; 

la acción del viento y del agua ha modelado las caprichosas formas de las Gredas constituidas por areniscas (fácilmente disgregables) y conglomerados con distinto grado de compacidad, 

prevaleciendo los de mayor resistencia (conglomerados) a los procesos de abrasión, creadores de la erosión alveolar que las hace especialmente atractivas.

Solo resta llegarme al aparcamiento con un calor pegajoso a pesar de lo temprano de la hora.



Descargar track

Comentarios