Collado Mangueta-Morra de las Moscas-Morrón Chico-Sendas del Caracol y Solana del Morrón
Por asfalto, bajo para tomar la pista a los Pozos de Nieve de Murcia;
en 200 m se inicia una traza senderil
que me lleva en constante ascenso
primero a un collado (1459 m) y después a la Morra de las Moscas (1502
m).
continuo recto por pateando suelo esquelético y pedregoso
al Llano de las Tres Carrascas, donde habitan algunas sabinas rastreras (moras);
paso junto a una torca o dolina, pequeña depresión geológica característica de los relieves kársticos;
hacen acto de presencia una buena manada de Arruis o Muflón del Atlas,
introducido en 1970 en Sierra Espuña con fines cinegéticos, su hábitat original es el Norte de África,
en ausencia competidores su número fue
en aumento, hasta que una epidemia de sarna redujo su población en un 90% entre
los años 1992 y 1994.
Realizo una pequeña trepada
antes de coronar el Morrón Chico o de Alhama (1444 m);
junto a la ruinosa garita que preside este Morrón Chico, azotado por los vientos y punto culminante de la ruta, se encuentra envuelto en una neblina espectral
que me impiden observar los picos y sierras circundantes, al
Norte, la cercana Cuerda del Estepar; al N.O. la Cuerda de Los Carrascales; por
el Oeste, Morrón de Arriba (1424 m) y Morrón de Espuña (1583 m); al Sur, Morrón
Largo (906 m) y Morrón Redondo (881 m) y al Este, los Barrancos de Gebas.
Vuelvo sobre mis pasos al track de la ida; cambio de dirección en el cruce de senderos,
para dirigirme a la umbría del Cerro Morrón,
donde vuelvo a ver arruis en grupo
y las paredes de Leiva (hasta 200 metros de
altura y más de 2 km) su aguda verticalidad y calcárea piel, enamoró a los
escaladores de generaciones pasadas y venideras por igual.
Transitando por puro paisaje fascinante, van apareciendo al paso los arces de Montpellier,
gustan de roquedos y humedad, sirviendo de pasto a los Arruis, (los animalicos no entienden que es una especie protegida);
desciendo por la Senda del Caracol en
Las Escalerillas -camino de servidumbre creado para las repoblaciones
promovidas por Ricardo Codorniú-.
Continuo por el sendero mampostero y pedregoso hacia la Solana del Morrón,
donde encuentro algunos ejemplares aislados de cornicabra (Pistacia terebinthus),
debido a que en sus ramillas aparecen curvadas o retorcidas, primero de color verdoso, luego rojizas y finalmente negruzcas,
las agallas producidas por el pulgón Baizongia pistaciae, sin consecuencias para la planta.
En las dos bifurcaciones de senderos,
continuo siempre a la derecha sin perder altura;
dejo atrás la zona del Gigante/ Rocas Gemelas;
el sendero cruza varios canchales,
salva una pequeña vaguada, empinándose bruscamente entre encinas y pinos laricios,
hasta volver a equilibrarse prácticamente,
enlazando con la pista de los Pozos de la Nieve y el aparcamiento.
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