Roncesvalles-GR-11-Regata Xuringua-Burguete-Robledal de las Brujas

Nos desplazamos al aparcamiento de Roncesvalles (Orreaga), al pie de Ibañeta en la Comunidad Foral de Navarra, donde se ubican principalmente casas e instituciones religiosas y de atención a los peregrinos jacobeos que realizan el Camino de Santiago por el Camino Francés.

Partimos rodeando la iglesia de Santiago

hacia la Real Colegiata de Santa María, antiguo hospital de peregrinos y enclave de profundas resonancias épicas,

construida a finales del siglo XII y principios del XIII, tumba del rey Sancho VII el Fuerte y excelente ejemplo de arquitectura medieval.

Tras 130 m carretera arriba, seguimos la pista forestal del GR-11 con el cartel del Parque Micológico Erro-Roncesvalles;

vamos divisando verdes y extensos pastos

mientras caminamos por el hayedo;

en el segundo cruce, seguimos a la derecha eludiendo un portillo,

cruzamos un sinuoso regato

y una zona de jóvenes hayas disfrutando de la sombra a tramos.

En 950 m, dejamos la pista entrando por la izquierda en descenso,

flanqueados de enormes abetos europeos (Picea abies);

menudo patrimonio forestal encontramos aquí;

cruzamos la cancela entroncando con la pista del PR-34,

poco mas adelante lo hacemos con un portillo,

pasamos junto al aparcamiento Lindus para el avistamiento de aves migratorias y la pista se abre de nuevo

con panorámicas de Ortzanzurieta.

Seguimos a la derecha en el cruce entre avellanos,

pasando por el puente rústico de madera sobre la Regata Xuringua

en un entorno paradisíaco; realizo unos metros por su orilla

hasta un área encharcada entre juncales y herbazales higrófilos, donde cantan y saltan ranas de gran tamaño.

De vuelta a la pista, aparecen dos milanos reales a beber agua del arroyo;

tras disfrutar del espectáculo de su vuelo,

seguimos pisteando al cruce con unas instalaciones agrícolas;

entramos por la Calle Zubiarte en el pueblo de Auritz Burguete; hacemos una parada bajo el templete

con la cartelería informativa sobre el humedal de Jauregiaroztegi.

Rodeamos la plaza del Ayuntamiento

para ver la iglesia medieval de San Nicolás de Bari;

el resto más destacado que se conserva, es la portada monumental de la fachada de 1699, costeada por la familia Oroz de Burguete, cuyo escudo de armas luce sobre la portada, en 1943 se adoptó como escudo de la villa;

bajo el mismo, las autoridades quemaron vivos a 5 vecinos de Burguete acusados de brujería. Además de la información sobre la Senda Pirenaica,

aparecen otras dos, una sobre la zona arqueológica de época romana denominada “Zaldua”, dos necrópolis (Ateabalsa y Otegi) y un tramo de calzada, todos ellos de la época altoimperial siglos I-II d.C.;

otro cartel nos habla de la Brujería en Navarra; como en el resto de Europa, la brujería dejó aquí una huella especialmente sombría en la historia, con las mujeres siendo las principales afectadas, como lo atestigua la lista de personas acusadas y enjuiciadas. Los juicios se usaron a menudo para dirimir diferencias personales entre vecinos, para apropiarse de tierras y propiedades.

Pensando en maleficios, sapos, venenos, vuelos a escoba, truculentas metamorfosis y aquelarres en la Cueva de Zurragamundi, torcemos a la derecha siguiendo la Calle Roncesvalles,

cambiamos de tema al de los oficios ancestrales en el coqueto jardín etnográfico,

con muestras de las metas piramidales de helechos o hierba, el tradicional baztarreko del solsticio de invierno y el duro oficio de carbonero.

Poco mas adelante aparece el Cementerio de Burguete, lo observamos desde su entrada en forma de letra A (Alfa), simboliza el principio de una nueva vida tras la muerte; el muro perimetral describe una elipse (Omega) y representa el fin de la vida terrenal;

Miguel Gortari Beiner, arquitecto pamplonés, diseñó uno de los espacios más evocadores y mágicos de Navarra, un cementerio donde no hay nichos y están prohibidos los panteones o mausoleos; despliega una retícula de parterres con cien parcelas, separadas por caminos de hormigón; pertenecen a cada una de las familia del pueblo y tiene una estela discoidal en la cabecera; sin diferencias sociales, la muerte iguala a pobres y ricos y aquí no se permite la ostentación suntuosa.

Pasamos junto a un área de descanso sombreada

y cruzamos la carretera, la pista del GR-65 nos deriva por la derecha al Robledal de las Brujas (Sorginaritzaga), lugar de aquelarres durante el siglo XVI,