Cabezo de la Estrella y Baterías del Roldán
Vuelvo a la carretera caminando hacia la izquierda
hasta su final;
en 650 m, dejo la pista de tierra, tomando a la izquierda el Sendero de los Caramanchones,
tras largo y empinado ascenso bordeando las alambradas que delimitan el campo de tiro,
entre calizas dolomíticas y rodeado de matorral
espinoso, alcanzo la cuerda del Cabezo de la Estrella.
Entre los cortados se aprecian preciosas vistas marítimas,
mientras voy coronando cimas;
visualizo por la izquierda el Collado y Cerro de
Roldán, Isla de las Palomas y el sendero hacia Fatares y La Torrosa; a la derecha el Cabezo de la Estrella (418 m), Puntal
del Moco (389 m), Cabezo de la Aguja y al fondo Cabo Tiñoso.
Desciendo por sendero abrupto al Collado del Roldán
e inicio el descenso bordeando el Cerro de Roldán durante 200 m,
atento a remontar por el barranquete de la Senda del Jabali; con mucha inclinación en su primer tramo,
en su segundad mitad,
poco más alto que la senda y bajo el Cerro de Roldán
(471 m), hay una covacha que me acerco a explorar.
Enlazo con la pista militar; tras 140 m giro a la izquierda por otro sendero
que acaba junto a la Batería Antiaérea del Roldan; construida en el año 1926 dentro del Plan de Primo de Rivera para la fortificación de las bases navales de El Ferrol, Mahón y Cartagena;
artillada en 1933 con cuatro piezas 105/44 A.A. de la casa Vickers Armstrong de Inglaterra, con un alcance de más de 13 kms, disponía de cuatro emplazamientos a barbeta,
protegidos por
un antemural recubierto, creando una planta de cuatro círculos comunicados
entre sí, en los que se abren las correspondientes chilleras de
amunicionamiento.
Esta batería tuvo un papel muy activo durante el período comprendido entre 15 de abril de 1937 al 21 de julio de 1938,
realizó 634 disparos contra la Aviación Nacional (aparatos italianos o alemanes) con granadas rompedoras de alto explosivo.
Tras el fin de la guerra, continuó
activada hasta 1959 y en 1965, quedó fuera de servicio.
De vuelta a la pista
y a la salida de la zona de acuartelamiento,
por la derecha desciendo por la Senda de la Batería del Roldán,
con vistas del Puerto de Cartagena
entre escalones, piedras sueltas y desnivel acusado en algún tramo.
Esta zona de monte declarada ZEPA protege al búho real, Halcón Peregrino y Águila perdicera; como paisaje de bosque mediterráneo, alberga numerosas plantas de interés: espinos, siemprevivas, lentiscos, palmitos, fagonias, cornicales, aliagas, romeros, tomillos, albaidas, espartos, cantuesos, esparragueras, cambrones, centaureas y turmeras.
Sigo recto en el primer cruce de sendas
y giro a la izquierda en el segundo, me saca a la pista hacia Tentegorra
y el aparcamiento, fin de ruta.
Comentarios
Publicar un comentario