Ruta de las 12 Figuras de Arenisca

 

Conoce al Indio, 

El Orejas, 

La Figura Bicéfala, 

El Durmiente, 

El Asustao,

 El Minotauro,

 La Cabeza de Jabalí, 

La Cabeza de Equino, 

El Dios-Sol, 

Las 2 Cabezas de Dragón

 y Júpiter

 en una ruta de 12 km con 12 figuras talladas en la roca arenisca y solo una dificultad en el descenso a la Rambla de Sangonera, pasando de fácil a moderada. 

Accedemos desde la autovía Murcia-Cartagena, por la rotonda de la Paloma (Salida 150) hacia el Castillo del Portazgo, giro a la derecha en el segundo cruce antes del parking; el Camino de los Melgarejos pasa frente a la Yeguada de Lo Pertiguero, dejando los dos primeros cruces, en el inicio del tercero a la derecha, se encuentra el aparcamiento bajo pinar (37°54'44.42"N 1°10'24.56"W).

Enfrente de la pista, desciende un sendero pateado al fondo de la Rambla del Cigarrón; la cortamos para ascender por pista hacia la Casa del Pino, 

la bordeamos en descenso al cercano cruce con una finca vallada; la vamos rodeando para tomar en descenso una pista enfrente de su entrada; nos conduce al cruce de senderos donde se encuentra “El Indio”.

Continuamos por el sendero de la izquierda pasando junto a dos pozos, 

relacionados con el canal entubado que transcurre por la Rambla de La Hiedra; 

al cruzar el inicio de un ramblizo observamos a “Carapino” 

y poco mas adelante veremos al “Orejas”.

Enlazamos con pista y cruzamos el puente sobre la Rambla de la Hiedra, 

paralelos a la misma en una pared vemos la “Figura Bicéfala” y,

 13 m mas adelante, el dúo

 formado por “El Durmiente”

y “El Asustao”. 

Hacemos una paradita para examinar la “Roca del Corazón” 

y la antigua canalización que sirvió para la extracción de piedra en la cantera bajo el cerro de 302 m.

Dejamos el sendero principal por otro a la derecha enlazando con la pista de la calzada romana, la seguimos pisteando en ligero descenso hacia Sangonera la Verde; acabado el arbolado en el principio de las tierras de labor, 

descendemos al lecho de la Rambla de Sangonera 

para visitar al Minotauro

 y la Cabeza de Jabalí separados por 90 m.

Se cierra la rambla 

presentando un rostro repetitivo

 al igual que un ojo, 

nos mantendrán entretenidos tratando de encontrarlos; haremos alguna trepada fácil, pasaremos bajo una covacha,

 paredones erosionados de formas caprichosas,

 otros con fósiles incrustados 

y árboles caídos que entorpecen nuestro paso.

Con la última cara y cadena, 

dejamos la Rambla de Sangonera por la del Pocico, la seguimos un trecho y atajamos a la calzada romana (no es tal calzada, sino una bonita pista con suelo rocoso que se adentra en la Finca de Las Llanas); la dejamos saliendo por la derecha al Sendero de los Mojones que asciende bajo pinar acabando en la pista asfaltada de las Llanas.

Tras 1,5 km, desde el collado (256 m) se inicia un sendero bajo pinar que desemboca en la Rambla del Cigarrón; solo tenemos que ir atentos descendiendo por la misma, a las figuras talladas en la arenisca que iremos encontrando. En una de sus múltiples curvas, escondido a la derecha, han puesto un coqueto belén de rechonchas figuritas; 

rodeamos por la derecha un estrechamiento rocoso; 

los paredones de arenisca se encuentran muy erosionados y originan constantes derrumbes a lo largo del lecho ramblero; 

en el centro del camino encontramos el relieve de una cabeza de equino

 y el perfil de un Dios-Sol/Apolo, 

la personificación del ideal de belleza masculina y el dios griego de la luz, el sol y la medicina; 

hijo de Zeus y la titan Leto, su hermana melliza era Artemisa. En la mitología griega, Helios 

se identificaba con el dios de la luz, Apolo; su equivalente en la mitología romana era el Sol Invictus.

En 30 m a nuestra derecha veremos la cabeza de un dragón al modo occidental, con dientes y mirada perversa; 

bajo los estratos de arenisca y los tramos de roca en el cauce, vamos progresando pendientes a nuestra derecha y elevada unos metros de la cabeza esculpida posiblemente de Júpiter, 

el padre de la luz y principal dios de la mitología romana.

En 130 m también por la derecha sobresale en curva la escultura de la cabeza del Dragón Chino; la palabra dragón deriva del griego drákōn (serpiente, dragón) y de la familia de un verbo que significa mirar fijamente, aplicada a la mirada de las serpientes; la mitología china lo trata como un ser legendario, poderoso y emblema de emperadores. 

Enlazamos con el track de la ida y, finalmente ascendemos al aparcamiento.

Descargar track

Comentarios