Capilla del Fraile y Cueva del Lagrimal desde la Colonia en la Sierra de Salinas
origen de un proyecto a principios del Siglo XX, se repartieron 49 lotes de tierras entre familias de jornaleros agrícolas «absolutamente pobres», constituyeron un pequeño núcleo de población rural que contaba con edificios comunales: iglesia, escuela, almacén y viviendas; Roturaron el terreno y realizaron plantaciones de viña y de olivo;
aunque según ley, tras los cinco primeros años, los colonos serían propietarios de los lotes; con la llegada de la Guerra Civil, muchos sus hombres tuvieron que abandonar la colonia, hubieron que pasar 90 años hasta el acto de adjudicatura de escrituras (15 de mayo de 2010).
Caminamos 150 m para tomar pista a la izquierda y comer unos apetitosos madroños a la vera del camino;
pasada la casa finca de Las Lobas,
comenzamos el ascenso prolongado y progresivo por las Lomas del Reloj a Cañada Cubillas en la Sierra de Salinas, frontera natural entre el norte de la Región de Murcia (Yecla) y distintas localidades del Alto y Medio Vinalopó (Comunidad Valenciana); longitudinalmente ocupa una extensión de aproximadamente 15 km; es una sierra de naturaleza calcárea con denso bosque de pinos carrascos y sotobosque de coscojas, madroños, durillos, madreselvas, cornicabras, jaras, espartales, etc.
Cruzamos el Barranco de Cabrillas y comienza la profusión del encinar, mas adelante la pista se hace sendero,
comenzamos a tener buenas vistas sobre la Silla del Cid;
se suceden los cabezos balizados,
mientras vamos cogiendo altura
sobre los campos de Pinoso,
la Sierra de Crevillente y el Mar Mediterráneo inclusive.
Alcanzamos el cruce con el PR CV-114;
seguimos la traza asomados al balcón que nos brinda la cresta lomera,
aunque mas adelante continuamos por otra pateada y separada de la cresta, para enfrentar el ultimo tramo empinado, escalonado, rocoso y con encinitas a las que asirse;
coronamos
la principal altura de esta Sierra de Salinas: el pico de la Capilla 1238 m o “Capilla del Fraile”,
nos hacemos las fotos en su vértice geodésico, donde convergen los términos de Villena, Pinoso y Yecla.
El aire frio del Norte no nos permite pasar mucho tiempo deleitándonos con las vistas panorámicas,
en el regreso,
vamos derivando a la izquierda en las dos bifurcaciones, atajando un poco al PR CV-114 por el sendero de la Cañada del Enebral;
al hacerse pista, nos tomamos los bocadillos
y volvemos a abrigarnos, terminando el tramo que nos conduce a la carretera del Aula de Naturaleza Coto Salinas con la Colonia.
La cruzamos
para llegarnos a la Cueva del Lagrimal,
cavidad natural de grandes dimensiones: 15 m ancho x 5 m de alto x 30 m de fondo;
orientada a poniente con dominio visual del corredor que comunica Yecla y Pinoso,
ofrece la posibilidad de controlar recursos naturales de la zona, motivo por el que ha sido habitada por el hombre desde la prehistoria.
En este importante yacimiento arqueológico, se han encontrado restos que van desde el 4000 a.C. hasta épocas mucho más recientes y se pueden visitar en el Museo de Villena.
En épocas más recientes ha sido refugio de bandoleros y aprisco para el ganado; observamos el techo ennegrecido, debido a las hogueras encendidas en el interior de la cueva durante siglos,
una parte del mismo desprendida
y el continuo goteo de las filtraciones de agua del techo, origen de su nombre.
Volvemos a la carretera
realizando 640 m, antes de abandonarla por pista a la derecha a modo de atajo,
ya que volvemos a enlazar con ella pasando frente a tres cortijos restaurados, la mayoría cuentan con horno adosado;
tras el olivar y una antigua balsa,
llegamos al cruce de la ida y al aparcamiento fin de ruta.
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