Santo Angel-Pista del Relojero-Sendero del Viejo Guarda de las Llanas-Ramblas Pétrea y Cigarrón
giro a la derecha en el segundo cruce realizando una corta y pronunciada subida, me saca al Convento de Santa Catalina del Monte,
mandado construir por el Obispo D. Victoriano López Gonzalo entre 1789 y 1805; tuvo una comunidad de legos (los hermanos legos tienen como propósito el apoyo práctico en la gestión de talleres, granjas, cocinas y otras dependencias); ahora acoge a la comunidad franciscana.
Por la derecha entro en el Parque Natural de El Valle,
la pista termina en el cruce asfaltado del Centro de Visitantes
y Arboretum
(jardín botánico con 8 terrazas y especies de los 5 continentes);
sin tocar la carretera, pedaleo paralelo al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre, en funcionamiento desde el año 1984, desempeña trabajos de investigación, recuperación y rehabilitación de especies de fauna silvestre;
rodeando el Albergue
abandono el asfalto a favor de la Pista del Relojero (Rambla de El Valle).
Hago una breve parada en el entronque con la pista al Sequén,
para seguir ascendiendo largamente
hasta el cruce con el Camino de las Minas del Cerrillar (Camino del Apóstol),
lo sigo al Collado de la Piedra; desciendo a la izquierda por la pista de la Cantera del Feo; cruzo la Rambla del Puerto y sigo por debajo de la autovía Murcia-Cartagena en el Puerto de La Cadena; asciendo por la Sierra del Puerto hacia Las Llanas,
tomando a la derecha en la bifurcación de pistas. Veo el Castillo de la Asomada,
paso el cruce con el Matahombres, me acompañan las vistas sobre Carrascoy y la Vega Media del Río Segura.
Salgo por sendero en fuerte ascenso de la Pista de las Llanas, hacia un mojón delimitador
para descender por el Sendero del Viejo Guarda de las Llanas, en principio con mucha pendiente,
se interna solitario por un frondoso pinar cortando algún ramblizo, rápido y divertido como pocos, ahora con el aliciente del piso muy húmedo;
tras largo disfrute, acabo en la pista asfaltada de las Llanas;
unos metros por la izquierda,
nace el revirado Sendero de los Mojones,
me saca a la Calzada Romana; la sigo a la derecha cruzando por el cartel informativo.
El descenso por suelo rocoso con la humedad provocada por las lluvias de ayer, me hace extremar la prudencia;
al llegar al cruce tuerzo a la izquierda porque recuerdo una traza senderil que deseaba investigar, pero vuelve a enlazar en unos metros con el incómodo sendero de surcos rocosos que llevaba; en 150 m, lo dejo descendiendo por sendero técnico en su inicio y muy entretenido en su desarrollo;
acaba en el cruce pistero donde, girando a la derecha al cruzar el puente sobre la Rambla de la Hiedra, tengo que esforzarme para volver a subir pisteando, girar a la izquierda y alcanzar el cruce de senderos.
Giro a la izquierda atento a dejarlo mas adelante por la derecha, realizando un trecho por la Rambla Pétrea
y otro por rota traza senderil a la pista que rodea el vallado de una finca; por la derecha bordeo la Casa de El Pino,
desciendo un tramo pendiente de tomar otra en desuso a la derecha;
se hace sendero y acaba en el lecho de la Rambla del Cigarrón, por el que continuo hasta su rampa de salida.
Desde el aparcamiento de la Rambla del Cigarrón, donde da la vuelta el bus, continuo por un senderillo corto, cruzando San Jose de la Montaña y descendiendo por pista y sendero con saltos entre olivos;
cruzo bajo la autovía, cortando la Carretera de la Paloma, me dirijo hacia la Ciudad Sanitaria Virgen de la Arrixaca; giro a la izquierda en la rotonda, enlazo por la derecha, desde el aparcamiento de pago en la zona Sur a través de un parque, con un ancho sendero acondicionado,
acaba bordeando la urbanización y por su explanada
me deja en el carril-bici,
que seguiré hasta torcer por la carretera de Santo Angel a la Plaza del Charco.
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