Collado de Roldán-Playa de Fatares-Sendero de la Pupa-Cristo de los Buzos
Accedemos por la autovía Murcia-Cartagena, circunvalando Cartagena salimos por Molinos Marfagones hacia Tentegorra, aparcamos antes de Los Díaz, cerca de los depósitos de agua del Canal del Taibilla en el parque de canales (37°36'12.42"N 1° 2'5.99"W).
Salimos por la pista de la Ruta de las Fortalezas en el Roldán, esta zona de monte declarada ZEPA protege al búho real, Halcón Peregrino y Águila perdicera;
como paisaje de bosque mediterráneo, alberga numerosas plantas de interés: espinos, siemprevivas, lentiscos, palmitos, fagonias, cornicales, aliagas, romeros, tomillos, albaidas, espartos, cantuesos, esparragueras, cambrones, centaureas y turmeras.
Dejamos la pista
por sendero antes de llegar a una propiedad privada por la que antes pasábamos; su propietario ha tapiado el acceso; una vez rodeada dicha propiedad, enlazamos con el sendero de costumbre al Collado de Roldán (308 m);
visualizando desde su impresionante mirador natural, por la izquierda el Cerro de Roldán, Isla de las Palomas,
el sendero hacia Fatares y La Torrosa por el que continuamos en descenso (a la derecha el Cabezo de la Estrella, Puntal del Moco, Cabezo de la Aguja y al fondo Cabo Tiñoso).
Descendemos por sendero aéreo,
dejamos a la izquierda la Senda del Jabali; en la zona de Los Hundidos, tomamos el ramal de la derecha, que nos hará bajar en un tramo de 200 m, 68 m de desnivel.
El descenso después se suaviza hasta la Rambla y Playa de Fatares, donde tomamos el mantente.
Iniciamos el ascenso desde la playa por el tortuoso y empinado Sendero de la Pupa,
cresteando por la arista montañosa durante 885m, remontando un desnivel de 215 m;
descendemos brevemente al collado de unión con el Sendero de la Parajola; lo seguimos por la izquierda
al inicio de la subida al Cristo de Los Buzos;
desde su cumbre,
podemos disfrutar de la panorámica resultante sobre las Algamecas, Cabo Tiñoso, la batería de la Podadera y el Puerto de Cartagena.
La imagen original del Cristo de los Buzos, arrancada en enero de 2017 y repuesta por un cristo más humilde, fue dañado y acabo por sustituirse por la reciente, creada por Elorrieta, artista y retirado submarinista del Centro de Buceo de la Armada, fue costeada por los militares del CBA;
la nueva talla en hierro, tiene una altura de 1,60 m, diseñada para evitar cualquier tipo de acto vandálico, ya que la viga donde se sustenta llega hasta 1,40 m bajo la roca, y otra viga atrás evita que pueda doblarse, por si eso fuese poco pesa entre 95 y 100 kg., supone un homenaje póstumo a todos los buceadores que han caído en acto de servicio.
Descendemos entroncando por el Sendero del Oso;
dejamos atrás un llamativo monolito rocoso,
para bordear unos paredones muy erosionados, con algunas covachas encima del nacimiento de la Rambla Fatares;
volvemos en subida ahora al Mirador del Roldán entre calizas dolomíticas, el inmenso mar y rodeados de matorral; caminamos lento por lo irregular del terreno, con escalones, piedras sueltas y desnivel acusado en algún tramo.
Finalizamos el descenso al aparcamiento variando ligeramente el sendero de vuelta.
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